Neuropsicología

La valoración neuropsicológica consiste en valorar el área cognitiva, conductual y emocional con el objetivo de identificar los puntos fuertes y débiles de la persona. Evaluamos las consecuencias de la disfunción cerebral en el comportamiento, poniendo especial atención en el estudio de funciones cognitivas superiores tales como: el lenguaje, el aprendizaje, la memoria, la función ejecutiva y el razonamiento. El principal objetivo de la valoración es determinar el nivel de desarrollo madurativo, las capacidades preservadas y las dificultades cognitivas específicas.

En el ámbito infantil, el proceso de valoración normalmente se inicia con la detección de dificultades por parte de la familia o la escuela. Se realiza una primera entrevista con la familia para recabar información y se ajusta la hoja de ruta de la administración de las pruebas pertinentes, según cada persona.

Una vez recogida toda la información, llegamos a un diagnóstico y al diseño de la intervención más adecuadas para las necesidades concretas de cada persona.

Se realizan valoraciones de:

  • Trastornos de aprendizaje (dislexia, discalculia y disgrafía).
  • Trastorno por déficit de atención/hiperactividad (TDAH).
  • Trastorno del Espectro Autista (TEA).
  • Trastorno del desarrollo del lenguaje (TDL).
  • Discapacidad intelectual.
  • Altas capacidades.
  • Perfil neuropsicológico en niños con patología neurológica.